Antes de invertir hay que tener en consideración varios factores. Primero, informarse, evaluar su disposición al riesgo y objetivos. También, se recomienda hacer un perfil de inversionista.
Cuando se piensa en inversión en bienes raíces, hay distintas modalidades y elección de instrumentos de capitalización, ahorro o endeudamiento.
Si bien nadie conoce lo que pasará en el mercado y cada persona conoce su realidad, hay pasos a considerar en cualquier inversión: objetivos del inversionista, monto disponible o presupuesto, rentabilidad deseada, aversión al riesgo y plazo.
Para quienes están dispuestos a invertir en bienes raíces, lo primero es considerar asesorarse por expertos. Hay tipos de inversión, e incluso se pueden poner los “huevos en distintas canastas”.
Todos quienes tengan un espíritu emprendedor pueden considerar la excelente opción de invertir en propiedades, buscando una estabilidad económica.
Para generar oportunidades de negocios rentables, es necesario tener presente el orden, la creatividad y el capital, pensando en dónde va a invertir, con qué presupuesto y qué quiere hacer con esa inversión, proyectándola en el tiempo.
La rentabilidad se mide con un concepto en inglés denominado ROI (Return of Investment) que es la “relación existente entre los beneficios que proporciona una determinada operación o cosa y la inversión o el esfuerzo que se ha hecho”, y se calcula dividiendo el monto del beneficio total con el monto inicial de inversión.
Siempre se define como un “negocio exitoso y rentable” aquel donde las ganancias obtenidas son mayores a los gastos realizados.
En momentos de alta incertidumbre económica, uno de los mercados más seguros y estables es sin duda el sector inmobiliario. “Los ladrillos no se mueven,” y con esta analogía se quiere decir que pese a los vaivenes económicos mundiales producto de la pandemia, hoy en día sigue siendo uno de los negocios más rentables y seguros en nuestro país.
Con los confinamientos, el sector inmobiliario se vio ampliamente golpeado. Con las cuarentenas se cerraron las oficinas y las salas de ventas de inmobiliarias, se paralizaron obras en construcción y los agentes dejaron de hacer visitas a las propiedades.
Sin embargo, este fue el mercado que primero se logró reactivar. La transformación digital llegó para quedarse, y el hecho de contar con equipos sólidos de trabajo, capacitación continua y proyectos en desarrollo permanente permitió que RE/MAX, con más de 560 asesores en todo Chile, siguiera creciendo, abriendo oficinas, rentabilizando negocios y liderando la participación de mercado en transacciones inmobiliarias.
Con la mayor liquidez, la portabilidad financiera, las bajas tasas de interés para optar a créditos hipotecarios hizo que el mercado ya no solo aumentara la demanda de inmuebles para vivir, sino también para hacer inversiones.
Hoy hay un segmento de la población interesada por invertir. El perfil del inversionista lo componen jóvenes entre 30 y 39 años, en su mayoría “profesionales de la salud (12,6%), técnicos (9,9%) y profesores (4,1%) (fuente biobiochile.cl).
Oportunidades para rentabilizar tu inversión inmobiliaria: